Águila y Sol
Su diseño se basó en un concepto global
de cocina contemporánea mexicana.
Desde el inicio se proyectó cuidadosamente cada etapa de su creación, a fin de construir un gran escenario para la gastronomía nacional que incluyó arquitectura, iluminación, cava, diseño gráfico e imagen, ambientación, propuesta y presentación de platillos, con el propósito de crear una experiencia total.
La filosofía de Águila y Sol puede resumirse como “amor a lo propio”. Su misión fue mostrar la grandeza de México a través de sus sabores, colores y texturas. La operación del restaurante fue impecable y se observó una rigurosa ética en el servicio, con satisfacción total de sus distinguidos clientes. Se desarrolló un concepto clásico con apertura a la modernidad. La inteligencia gastronómica en las cartas de platillos y bebidas especiales incluyó un lenguaje gastronómico y un mirada a la estética.
El desarrollo de Águila y Sol fue extraordinario. Su concepto se distinguó rápidamente de otros restaurantes y en cinco años se hizo acreedor a los premios y reconocimientos más importantes del ramo, que le dieron gran prestigio a nivel nacional e internacional.